En un caso que ha estremecido a la ciudad de Puebla, María Consuelo ‘N’, de 46 años, compareció ante la justicia tras ser aprehendida por agentes de la Unidad Especializada de Delitos Contra Animales de la Fiscalía General del Estado de Puebla. La acusación: vender carne de perro camuflada como carne enchilada en la Unidad Habitacional Bosques de San Sebastián.
Los hechos salieron a la luz el 19 de septiembre de 2019, cuando el propietario de un perro de raza French Poodle descubrió la terrible verdad que se ocultaba en el departamento 4 del Edificio 52 de la mencionada unidad habitacional. Tras la denuncia, se realizó un allanamiento donde se rescataron más de 90 perros con vida y se encontraron 45 cuerpos de animales sin vida, algunos de ellos mutilados.
En la audiencia de control llevada a cabo este viernes 19 de abril en la Casa de Justicia de Puebla, la defensa de María Consuelo ‘N’ exigió la pena máxima para la acusada, mientras que Erika Marisol Hevia, una activista a favor de los derechos de los animales, habló en representación de las mascotas afectadas.
Hevia, quien ha estado al frente de la denuncia desde el principio, reveló el macabro modus operandi de María Consuelo ‘N’: la preparación de carne enchilada con el fin de ocultar el verdadero origen del producto, que luego vendía en un puesto ubicado frente a una iglesia local los domingos.
En una entrevista, Hevia describió el horror encontrado dentro del departamento allanado. “Fueron 45 cuerpos más, los perritos que en su momento se llevaron; más de 90 con vida todavía. Tenía refrigeradores, ahí tenía todos los cuerpos y aparte tenía unas cajas, cubetas, con todos los cuerpos de los perritos ya mutilados”, detalló la denunciante.
El caso ha generado una ola de indignación y reflexión en la comunidad, que clama por justicia para los indefensos animales que fueron víctimas de este horrendo crimen. La sociedad exige medidas contundentes para prevenir y combatir el maltrato animal, asegurando que quienes cometan tales actos enfrenten las consecuencias legales correspondientes.
La audiencia sobre este caso tan sensible ha reavivado el debate sobre la importancia de proteger a los animales y castigar con severidad cualquier acto de crueldad en su contra. La comunidad espera que este acto de crueldad no quede impune y que se haga justicia en nombre de los inocentes afectados.