En la noche del 7 de mayo, una serie de apagones repentinos dejaron a decenas de colonias en la oscuridad en la Ciudad de México (CDMX), Estado de México (Edomex), Hidalgo, Guanajuato, Quintana Roo, Zacatecas, Puebla, San Luis Potosí, Chiapas y otras entidades. El corte en el suministro eléctrico, que comenzó aproximadamente a las 19:30 horas, generó preocupación y llevó a los ciudadanos a buscar respuestas sobre la causa y cómo enfrentar la situación.
Las zonas más afectadas en la capital del país fueron las alcaldías Gustavo A. Madero y Azcapotzalco, en los límites con el territorio mexiquense. En Edomex, municipios como Toluca, Chalco, Ixtapaluca, Juchitepec y Tlalmanalco también experimentaron el impacto de este apagón masivo.
La activación del estado operativo de emergencia por parte del Centro Nacional de Control de Energía (CENACE) señaló que las reservas de energía se encontraban por debajo de los niveles considerados seguros, lo que llevó al sistema eléctrico a operar fuera de sus márgenes normales. Aunque el sistema continuó funcionando de manera estable, la situación generó incertidumbre entre la población.
Este escenario de emergencia podría atribuirse a varios factores, incluida una reducción en el suministro de gas natural importado desde Estados Unidos. Además, momentos de alta demanda de gas natural, como durante el invierno para calefacción o en episodios de altas temperaturas con el uso intensivo de aire acondicionado, también podrían contribuir a la situación.
Fenómenos climáticos extremos, como huracanes, tormentas o oleadas de calor y frío, también pueden desencadenar estados de emergencia en el suministro eléctrico.
Aunque el estado de emergencia se mantuvo por cerca de una hora, entre las 17:04 y las 17:52 horas, durante este martes, no es la primera vez en el año que el sistema interconectado nacional enfrenta esta situación. En enero, la CENACE también declaró que operaba temporalmente fuera de los parámetros regulares.
Ante este tipo de emergencias, es importante que los ciudadanos estén preparados para enfrentar la situación de manera segura. Se recomienda el uso de linternas en lugar de velas para evitar incendios, así como desconectar o apagar electrodomésticos y aparatos electrónicos para evitar daños por sobrevoltaje al restablecerse la electricidad. Además, se aconseja mantener cerrados los refrigeradores y congeladores para conservar la temperatura interna y evitar la descomposición de alimentos. En caso de utilizar generadores eléctricos, es esencial ubicarlos en exteriores para evitar la intoxicación por monóxido de carbono.
Los ciudadanos, ante la incertidumbre de futuros apagones, están tomando medidas para enfrentar la situación de manera segura y organizada, siguiendo las recomendaciones de las autoridades y buscando alternativas para mitigar los impactos de estos cortes en el suministro eléctrico.