La 4T Se Prepara para Cambiar la Constitución de México Sin Necesidad de Negociar con la Oposición

Morena y sus aliados aseguran la mayoría calificada en la Cámara de Diputados, facilitando reformas constitucionales prioritarias sin comprometerse con el bloque opositor.

A partir de septiembre, el gobierno de la Cuarta Transformación (4T), encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, se encontrará en una posición privilegiada para implementar reformas constitucionales de gran calado, gracias a la “sobrerrepresentación” de Morena y sus aliados en el Congreso. El Instituto Nacional Electoral (INE) determinó el pasado 23 de agosto que Morena contará con una supermayoría en la Cámara de Diputados, mientras que en el Senado también tendrá una amplia mayoría, lo que le permitirá reunir las dos terceras partes necesarias para modificar la Constitución sin la necesidad de negociar con el bloque opositor.

En la Cámara de Diputados, Morena, el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y el Partido del Trabajo (PT) sumarán 364 de las 500 curules, superando cómodamente los 335 votos requeridos para lograr una mayoría calificada. Esta ventaja significa que las fuerzas alineadas con la 4T podrán avanzar en su agenda legislativa sin la obligación de buscar consensos con los partidos opositores, abriendo la puerta a reformas significativas en áreas como el Poder Judicial, la ley electoral y la eliminación de organismos autónomos.

En el Senado, aunque Morena y sus aliados estarán a sólo tres votos de alcanzar la mayoría calificada, su liderazgo, bajo la dirección de Adán Augusto López Hernández e Ignacio Mier, confía en conseguir el respaldo de tres senadores de la oposición para completar el quórum necesario y así aprobar las reformas constitucionales propuestas por el presidente López Obrador en su Plan C.

Una vez aprobadas por el Congreso, estas reformas deberán ser ratificadas por la mayoría de las legislaturas estatales, es decir, al menos 17 de las 32 entidades federativas. Dado que Morena gobierna en 25 estados, se anticipa que este proceso no enfrentará mayores obstáculos.

Olga Sánchez Cordero, diputada electa de Morena para la LXVI Legislatura, ha subrayado la importancia de revisar y reformar varios aspectos del sistema político y judicial del país. Entre las reformas prioritarias mencionadas por Sánchez Cordero se encuentran la eliminación de los organismos constitucionalmente autónomos y la reforma al Poder Judicial, que incluye la elección de jueces y magistrados mediante voto popular.

Sánchez Cordero también destacó la necesidad de garantizar que los jueces y magistrados elegidos cumplan con estrictos requisitos de idoneidad, experiencia y honorabilidad, para evitar que personas incompetentes o de dudosa reputación accedan a estos cargos.

Aunque Morena y sus aliados ya tienen la mayoría calificada asegurada, Sánchez Cordero enfatizó la importancia de dar voz a todas las fuerzas parlamentarias y promover la pluralidad en la toma de decisiones, una declaración que refleja el compromiso de la 4T de mantener la legitimidad de sus reformas, incluso en un escenario en el que no necesitan negociar con la oposición.

En cuanto a su futuro rol en la nueva legislatura, Sánchez Cordero manifestó su interés en presidir la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados durante el primer año de la LXVI Legislatura, o en su defecto, encabezar la Comisión de Justicia. Asimismo, recordó el deseo de la presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo, de que la diputada Ifigenia Martínez, ícono de la izquierda, coloque la banda presidencial el 1 de octubre, en un acto cargado de simbolismo.