Presunto responsable sería familiar de un operador del CJNG
Las autoridades confirmaron que el asesino de Carlos Manzo, alcalde de Uruapan, Michoacán, fue identificado como Osvaldo Gutiérrez Vázquez, conocido como El Cuate. De acuerdo con los primeros informes federales, el presunto homicida era originario del municipio de Apatzingán y tendría vínculos familiares con un hombre apodado El Prángana, señalado como operador de un grupo criminal ligado al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Vínculos con el crimen organizado
Según reportes citados por medios nacionales, El Prángana estaría relacionado con los hermanos Ramón y Rafael Álvarez Ayala, alias R1 y R2, respectivamente, quienes presuntamente operan para el CJNG. La Secretaría de la Defensa Nacional había informado en 2012 sobre el arresto de varios miembros del cártel, incluidos los hermanos Álvarez Ayala, acusados de bloqueos e incendios de vehículos en Jalisco y Colima.
En aquel entonces, el Ejército señaló que El R1 era el segundo hombre más importante dentro de la estructura del CJNG, mientras que El R2 fungía como lugarteniente encargado de coordinar células criminales y proveer vehículos a la organización. Además, Rafael Álvarez confesó que recibía órdenes directas de Nemesio Oseguera Cervantes, alias El Mencho, y colaboraba con su hermano para el envío de drogas sintéticas hacia Estados Unidos.
Ataque y consecuencias en Michoacán
El asesinato de Carlos Manzo ocurrió la noche del 1 de noviembre, durante el Festival de las Velas en Uruapan. El alcalde fue atacado a balazos y, aunque fue trasladado a un hospital, perdió la vida horas después. La Fiscalía General del Estado informó inicialmente que el agresor habría actuado bajo los efectos de drogas.
Tras el crimen, se registraron manifestaciones en distintas localidades de Michoacán los días 2 y 3 de noviembre, en reclamo de justicia y seguridad. Durante el funeral, el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla fue confrontado por habitantes molestos por la violencia en la región. En medio del dolor, Grecia Quiroz, esposa del alcalde asesinado, expresó su intención de continuar con el legado político y social de su esposo.
