La mañana del 12 de junio se perpetró un trágico ataque armado en las instalaciones del colegio Camino Real, ubicado en la colonia Santiago Momoxpan de San Pedro Cholula, Puebla, que resultó en la muerte de un menor de edad y heridas graves a un adulto.
Según la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) municipal, el ataque ocurrió alrededor de las 07:20 horas, coincidiendo con la hora de entrada de los estudiantes. Un sujeto armado, a bordo de una motocicleta, esperaba la llegada de una camioneta Toyota Sienna en la que viajaban cuatro personas, un hombre y tres menores de edad. Al notar su arribo, el agresor abrió fuego, impactando al conductor. Este perdió el control del vehículo y se estrelló contra un poste frente a la institución educativa.
Testigos presenciales relataron que el atacante disparó en repetidas ocasiones, hiriendo al hombre que conducía la camioneta. Al llegar los servicios de emergencia, los paramédicos de Protección Civil Municipal confirmaron la muerte de un joven de 16 años, quien no mostró signos vitales al momento de su arribo. El conductor, cuya identidad permanece protegida, fue trasladado de inmediato a un hospital cercano para recibir atención médica urgente.
Las autoridades aún no han revelado detalles sobre la condición actual del hombre herido ni han clarificado su relación con los estudiantes afectados. La Fiscalía estatal ha tomado las riendas de la investigación para esclarecer los hechos y determinar el motivo detrás de este violento ataque.
El gobernador de Puebla, Sergio Salomón, expresó sus condolencias a las familias afectadas y anunció la intervención de la Fiscalía para asegurar una investigación exhaustiva. “Estamos pendientes de lo sucedido hace unos momentos en donde lamentablemente un menor de edad perdió la vida en un hecho violento. Otro menor y un adulto resultaron lesionados, de acuerdo al último reporte. La Fiscalía ya realiza las pesquisas a fin de clarificar los hechos, conocer el móvil y, en coordinación con las fuerzas de seguridad estatales y municipales, dar con los responsables”, comentó el gobernador a través de sus redes sociales.
La violenta balacera ha causado un estado de alarma entre la comunidad escolar y los padres de familia, quienes, preocupados por la seguridad de sus hijos, se dirigieron al colegio para recoger a sus hijos. Aunque las autoridades aseguran que la seguridad del instituto no se vio directamente amenazada, el temor de los padres es palpable.
Este lamentable incidente pone de relieve la creciente preocupación por la seguridad en las inmediaciones de las escuelas y la necesidad de una respuesta rápida y efectiva por parte de las autoridades para garantizar la tranquilidad de las comunidades educativas. La colaboración entre la Fiscalía y las fuerzas de seguridad será crucial para llevar justicia a las víctimas y prevenir futuros actos de violencia en la región.