La icónica artista narra tensos momentos en su relación y su camino hacia la liberación.
Cher, de 78 años, sorprendió al mundo al compartir detalles de su turbulento matrimonio con Sonny Bono en sus memorias Cher: The Memoir (Part One), publicadas el 19 de noviembre. La cantante y actriz reveló que su exesposo, con quien estuvo casada durante 11 años, llegó a confesar que pensó seriamente en matarla.
En un episodio impactante, Cher describió cómo Bono admitió que en octubre de 1972, durante un momento crítico de su relación, contempló arrojarla desde el balcón de su habitación de hotel en Las Vegas. La revelación surgió tras una conversación tensa, en la que Cher expresó de manera irónica su intención de separarse mencionando al guitarrista de su banda. Sonny, visiblemente afectado, respondió con un comentario perturbador sobre su pensamiento de cometer el acto y justificarlo como locura para obtener beneficios posteriores.
“Pensé que plegaría locura como Spade Cooley y obtendría siete años de prisión antes de que me liberaran. Luego conseguiría un contrato de libro y mi propio programa”, relató Cher que dijo su exmarido.
La respuesta de Cher, aunque inquietante, reflejó la desesperación que vivía. “Le dije que no necesitaría empujarme, porque yo misma iba a saltar”, escribió la artista en su libro, detallando que su matrimonio estuvo marcado por el control extremo de Sonny y episodios de profunda soledad.
Una relación controladora y llena de desafíos
Cher describió a Bono como una figura controladora. Le imponía restricciones personales, como prohibirle el uso de perfume, y justificaba sus infidelidades atribuyéndolas a la falta de intimidad en la pareja. La relación, que comenzó cuando Cher tenía apenas 16 años y Sonny 27, estuvo plagada de dificultades desde el principio.
Durante el matrimonio, Cher descubrió repetidas infidelidades de Bono, incluido un episodio en el que lo encontró con su asistente personal. En sus memorias, relata cómo huyó a casa de su madre, quien confirmó que ya conocía las aventuras del cantante.
La presión emocional llevó a Cher a considerar el suicidio en varias ocasiones mientras estaban en Las Vegas. “Vi lo fácil que sería dar un paso y simplemente desaparecer”, confesó, aunque finalmente halló fuerzas para no ceder.
Un camino hacia la libertad
La cantante, quien se divorció de Bono en 1975, explicó en sus memorias cómo llegó a una reveladora conclusión: “No tengo que saltar. Puedo simplemente dejarlo”. Este momento marcó el inicio de un nuevo capítulo en su vida.
Tras el divorcio, Cher se consolidó como una figura de independencia y autenticidad, tanto en su vida personal como en su carrera artística. Su relación actual con Alexander Edwards, de 38 años, demuestra su desprecio por las convenciones sociales. “El amor no entiende de matemáticas”, señaló, defendiendo su decisión de vivir según sus propias reglas.
Un legado sin límites
Cher continúa siendo un icono de resiliencia y autenticidad. Con una segunda parte de sus memorias planeada para el próximo año, la artista demuestra que está lejos de agotar sus historias y su capacidad de inspirar.