Elaboración del auténtico Pastel Azteca: un platillo ancestral con un toque contemporáneo

Descubre la historia del pastel azteca, una delicia tradicional mexicana con capas de sabor, maíz y herencia culinaria.

Historia y Origen

El pastel azteca es una representación culinaria de la riqueza prehispánica y colonial de México. Aunque el nombre evoca a los aztecas, su origen se encuentra en la mezcla de ingredientes indígenas, como el maíz, y técnicas traídas por los españoles. Los antiguos habitantes de Mesoamérica utilizaban el maíz como base de su alimentación, y este ingrediente sigue siendo esencial en la gastronomía mexicana actual.

El maíz es el corazón de la tortilla, y la tortilla es el alma del pastel azteca. Este platillo se considera una especie de “lasaña mexicana”, donde las capas de tortilla reemplazan a la pasta, creando un ensamblaje de sabores locales que resalta la diversidad de ingredientes que llegaron tras la conquista, como el queso y la crema.

Aunque es un plato tradicionalmente casero, su popularidad ha trascendido las cocinas familiares para ocupar un lugar importante en las mesas de restaurantes que buscan realzar la cocina mexicana.

Receta: Pastel Azteca

Ingredientes (para 6 porciones):

  • 12 tortillas de maíz
  • 500 g de pechuga de pollo cocida y deshebrada
  • 4 jitomates grandes
  • 1 cebolla mediana
  • 2 dientes de ajo
  • 2 chiles poblanos
  • 200 g de queso Oaxaca desmenuzado (puedes usar mozzarella como alternativa)
  • 200 ml de crema mexicana
  • 1 taza de granos de elote (pueden ser de lata)
  • Aceite vegetal
  • Caldo de pollo (1 taza)
  • Sal y pimienta al gusto
  • Cilantro fresco para decorar

Instrucciones:

  1. Preparar la salsa:
    Asa los jitomates, la cebolla y los ajos en un comal hasta que estén dorados. Pela los jitomates y licúalos junto con los ajos, cebolla y un poco de caldo de pollo hasta obtener una salsa suave. Sazona con sal y pimienta al gusto y cocina la salsa a fuego medio durante 10 minutos.
  2. Asar los chiles poblanos:
    Asa los chiles poblanos directamente sobre la llama hasta que la piel esté completamente quemada. Colócalos en una bolsa de plástico para sudarlos durante unos minutos y luego pélalos, retira las semillas y córtalos en tiras.
  3. Freír las tortillas:
    En un sartén, calienta aceite vegetal y fríe ligeramente las tortillas de maíz. No deben quedar completamente crujientes, solo doradas y flexibles. Esto ayudará a mantener la estructura del pastel.
  4. Ensamblar el pastel:
    En un refractario para horno, coloca una capa de tortillas fritas en el fondo. Encima, agrega una capa de pollo deshebrado, tiras de chile poblano, granos de elote y queso. Vierte una cantidad generosa de la salsa de jitomate y un par de cucharadas de crema. Repite el proceso hasta formar al menos tres capas, asegurándote de terminar con salsa y queso en la última capa.
  5. Hornear:
    Precalienta el horno a 180°C. Cubre el refractario con papel aluminio y hornea durante 25 minutos. Destapa y hornea por 10 minutos más, o hasta que el queso esté gratinado y burbujeante.
  6. Servir:
    Retira del horno y deja reposar unos minutos antes de servir. Decora con cilantro fresco picado y acompaña con una ensalada verde o frijoles refritos.

El pastel azteca es un platillo versátil, donde la receta puede variar según la región o los ingredientes disponibles. Algunas versiones incluyen rajas de chile poblano con crema, carne molida o salsa verde en lugar de la tradicional salsa roja.