Un militar grave fue trasladado de emergencia; la emboscada se atribuye a un cártel criminal.
Siete militares mexicanos resultaron heridos tras un ataque con explosivos en el municipio de Cotija, según confirmó la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Michoacán. La agresión, que ocurrió en un camino rural que conecta la comunidad de Gallineros con la cabecera municipal, ha sido vinculada preliminarmente al Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Los hechos
El ataque ocurrió mientras los militares realizaban labores de patrullaje. Según reportes preliminares, los elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) fueron emboscados por un grupo armado. Aunque no se ha determinado la naturaleza exacta del ataque, versiones iniciales apuntaron al uso de drones con explosivos, mientras que otras señalaron una mina terrestre improvisada como causa del estallido.
Alertados previamente por habitantes de la zona sobre movimientos sospechosos, los militares no habrían atendido las advertencias, según informó el periodista Carlos Arrieta en El Universal. Posteriormente, grabaciones difundidas revelaron que presuntos integrantes del CJNG utilizaron drones para vigilar el convoy militar por un periodo prolongado antes del ataque.
Respuesta inmediata y protocolo de emergencia
Tras el incidente, la SSP desplegó tres aeronaves para trasladar a los heridos. Los paramédicos, bajo el protocolo “Código Trauma”, coordinaron su salida desde el hangar de la Dirección de Servicios Aéreos en Morelia, trabajando en conjunto con el Centro Regulador de Urgencias Médicas (CRUM).
De los heridos, uno fue trasladado de emergencia al Hospital Militar de Apatzingán y otro al ISSSTE, ambos en estado grave. Otros militares con lesiones moderadas recibieron atención en hospitales cercanos.
En tanto, elementos de la Guardia Civil y de las Fuerzas Armadas acudieron al lugar para asegurar el perímetro y realizar investigaciones preliminares sobre el ataque.
Clima de violencia en Michoacán
El ataque se inscribe en un contexto de creciente violencia en Michoacán, donde grupos del crimen organizado como el CJNG mantienen disputas territoriales. Este cártel, conocido por sus tácticas violentas, ha empleado drones con explosivos en ataques anteriores, incrementando los riesgos para las fuerzas de seguridad.
Aunque las autoridades aún no han proporcionado detalles concluyentes sobre el ataque, este incidente refleja el nivel de sofisticación que algunos grupos criminales han alcanzado en su capacidad operativa.
Mientras tanto, el gobierno federal enfrenta una presión creciente para implementar estrategias efectivas que garanticen la seguridad de las fuerzas armadas y la población civil en regiones azotadas por el crimen organizado.