En una conferencia de prensa en la emblemática Mañanera del presidente Andrés Manuel López Obrador, el titular de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Manuel Bartlett, presentó con notable optimismo los avances en las acciones de rescate de mineros atrapados en Pasta de Conchos y El Pinabete, ambos en el estado de Coahuila. Este anuncio marca un hito en la búsqueda de justicia para las víctimas de uno de los peores desastres mineros de México.
A 18 años del fatídico colapso en Pasta de Conchos, Bartlett anunció que el próximo mes de mayo marcará el inicio de la tan esperada búsqueda de los mineros atrapados en lo que él describió como “un enjambre de minas”. Este anuncio, que resuena en los corazones de los afectados y la nación en su conjunto, representa un compromiso renovado del gobierno de AMLO con la justicia y la seguridad de los trabajadores.
“Ha significado enormes esfuerzos… estamos cerca ya en Pasta de Conchos, estamos ya, se encontró en la popa de la galería donde seguramente están, o sea, estamos cerca después de enormes trabajos”, declaró Bartlett durante la conferencia. Estas palabras, cargadas de esperanza, traen un rayo de luz a una tragedia que ha marcado a toda una generación.
El colapso en la mina de gas metano ocurrió en el año 2006, dejando un saldo devastador de 65 mineros sin vida y 11 más con graves quemaduras. La mina, operada bajo la concesión de Grupo México, propiedad del empresario Germán Larrea, se convirtió en un símbolo de la negligencia y la falta de seguridad en el sector minero mexicano. El rescate de los cuerpos se ha convertido en un compromiso personal del presidente López Obrador desde su campaña en 2018.
El ingeniero César Fuentes, encargado de las acciones de acondicionamiento en la mina para la búsqueda de los mineros, detalló los desafíos técnicos y logísticos que han enfrentado. Controlar el agua en el interior de la mina y garantizar la calidad del aire, especialmente debido a las altas concentraciones de gas metano, son condiciones imprescindibles para el ingreso seguro de los equipos de rescate.
Fuentes explicó que, gracias a los estudios realizados por el Servicio Geológico Mexicano en 2019 y 2020, se determinó la factibilidad del rescate de los mineros. Sin embargo, reconoció que la tarea es extremadamente compleja y peligrosa. El trabajo ha implicado abrir nuevos espacios para llegar a las zonas donde se cree que se encuentran los grupos más significativos de mineros, evitando las galerías colapsadas.
Dos puntos clave han sido identificados, donde se estima que hay grupos de 13, 18 y 20 mineros, dos de ellos cerca de zonas de explosión. Para llegar a estos lugares, se están utilizando dos procedimientos: las lumbreras 1 y 2, excavaciones verticales con 8 metros de diámetro y profundidades que oscilan entre 145 y 170 metros.
Este anuncio marca un paso significativo hacia la justicia para las víctimas y sus familias. La determinación del gobierno de AMLO y el compromiso de los equipos de rescate inspiran esperanza en un país que busca cerrar las heridas de una tragedia que ha dejado una profunda huella en la historia de México.