Israel y Hamas negocian en Egipto un acuerdo de paz, con respaldo de Trump, Biden y líderes regionales.
A través de un esfuerzo diplomático sin precedentes liderado por Egipto y apoyado por potencias globales, Israel y Hamas están cerca de alcanzar un acuerdo para liberar a 101 rehenes judíos secuestrados en Gaza. Esta iniciativa busca concretarse antes del 20 de enero de 2025, fecha en que Donald Trump asumirá nuevamente la presidencia de Estados Unidos.
Contexto político y diplomático
La mediación cuenta con el aval de la administración saliente de Joe Biden, quien coordina con el presidente electo Trump. Este último, interesado en proyectar liderazgo desde antes de asumir, ha enviado a figuras clave, como el senador Lindsey Graham, a negociar con líderes regionales. Graham mantuvo reuniones con el príncipe saudí Mohammed Bin Salman y el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, consolidando apoyo para un cese del fuego que contemple la liberación de los rehenes.
En paralelo, Irán ha suavizado su postura, permitiendo que Hamas también busque una solución menos intransigente. Este cambio en la dinámica regional se ha dado tras 14 meses de enfrentamientos intensos en Gaza y un desgaste militar significativo de ambas partes.
Puntos clave del acuerdo
Las negociaciones en El Cairo, encabezadas por el líder de Hamas, Jalil Al Hayya, giran en torno a cinco aspectos principales:
- Apertura del paso de Rafah: Israel permitirá el flujo limitado de bienes, restringiendo el ingreso de armas.
- Liberación de los rehenes: Hamas deberá entregar a los 101 secuestrados en un plazo de una semana.
- Presencia militar en Gaza: Israel podrá mantener un contingente reducido en áreas estratégicas.
- Regreso de desplazados: Garantías para que los palestinos puedan volver a sus hogares.
- Comité de supervisión internacional: Similar al modelo aplicado en Líbano, se establecerá un organismo para monitorear el cese de hostilidades.
Un desafío político para Netanyahu
La negociación enfrenta resistencias internas en Israel. Netanyahu, presionado por su ala más conservadora, descartó retirar completamente las tropas israelíes de Gaza, una condición inicial de Hamas. Sin embargo, la flexibilización de Irán y el interés global en la estabilización de la región han abierto nuevas posibilidades.
Horas antes de que se anunciara el acuerdo en Líbano, Joe Biden y Netanyahu discutieron una tregua de 60 días en Gaza, apoyada por Qatar, Arabia Saudita y otros actores clave. Este contexto internacional favorece un desenlace favorable, aunque persisten riesgos inherentes al cumplimiento del pacto.
Perspectivas
Con solo 51 días para la asunción de Trump, el tiempo apremia. El compromiso entre Israel y Hamas, de concretarse, no solo resolvería una crisis humanitaria, sino que marcaría un precedente en la política exterior estadounidense.