La soberanía nacional se impone ante un vuelo programado desde territorio estadounidense.
México ha rechazado el aterrizaje de un avión militar estadounidense que transportaba migrantes deportados, según información revelada por NBC News. Este incidente pone en el centro de la atención las tensas relaciones entre ambos países en torno a las políticas migratorias.
El jueves 23 de enero, Estados Unidos inició los vuelos de repatriación de migrantes indocumentados como parte de las medidas impulsadas por el presidente Donald Trump para frenar la inmigración ilegal. Desde la base Biggs Army Air Field en Texas despegaron dos vuelos con destino a Guatemala, transportando entre 75 y 80 personas cada uno. Sin embargo, un tercer vuelo que tenía como destino México no salió debido a la negativa del país para permitir su acceso.
Confusión en las declaraciones oficiales
Mientras NBC informó sobre la decisión de México de bloquear la entrada del avión, el Instituto Nacional de Migración (INM) negó estos hechos, pero no ofreció detalles adicionales. Por su parte, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) indicó que está trabajando en un posible posicionamiento oficial.
Este rechazo ocurre en un contexto de creciente tensión entre las dos naciones. La administración estadounidense busca implementar estrictas medidas de control migratorio, que incluyen la declaración de emergencia nacional en la frontera y la clasificación de cárteles mexicanos como grupos terroristas.
Respuesta de México: defensa de la soberanía
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, subrayó durante una conferencia de prensa el compromiso de su gobierno con la defensa de la soberanía e independencia del país. “Ellos pueden actuar en su territorio; nosotros lo que decimos es la defensa de nuestra soberanía e independencia”, afirmó la mandataria.
Sheinbaum también hizo un llamado a mantener un diálogo abierto para resolver las diferencias, mientras que reiteró la postura firme de México frente a las políticas de deportación de la administración Trump.
Repercusiones y fortalecimiento fronterizo
En paralelo, la Casa Blanca anunció la llegada de refuerzos militares a la frontera con México, donde al menos mil 500 elementos del Cuerpo de Marines se sumarán a las tareas de vigilancia para evitar el ingreso de migrantes indocumentados. Estas acciones forman parte de una operación masiva que ya ha resultado en la detención de 538 migrantes en los primeros días del segundo mandato de Trump.
La medida de rechazar el vuelo es interpretada por analistas como un intento de México de reafirmar su autonomía en medio de presiones internacionales. Sin embargo, el impacto en las relaciones bilaterales y en la situación humanitaria de los migrantes deportados permanece incierto.