El primer ministro visitó Jerusalén tras el ataque que dejó seis muertos y prometió medidas contra las aldeas de los agresores
El primer ministro Benjamin Netanyahu afirmó que Israel enfrenta una gran guerra contra el terrorismo tras visitar el lugar del ataque en Jerusalén donde dos palestinos mataron a seis personas y dejaron a doce heridas.
El ataque en Jerusalén
Los agresores abrieron fuego contra una parada de autobús durante la hora punta matutina. Un soldado y un civil lograron neutralizarlos.
Netanyahu acudió al lugar dos horas después del ataque. Su comparecencia judicial por corrupción se pospuso debido a la crisis.
El primer ministro señaló que se están cercando las aldeas de origen de los atacantes, situadas cerca de Ramallah en Cisjordania.
Reacciones y medidas de seguridad
Netanyahu aseguró que Israel continuará sus operaciones en la Franja de Gaza y en Judea y Samaria, nombre bíblico usado para Cisjordania.
Explicó que fuerzas del Shin Bet, las FDI y la policía evitaron cientos de ataques este año. Sin embargo, admitió que no lograron impedir el ocurrido en Jerusalén.
Las autoridades desplegaron cientos de efectivos en la zona para descartar la presencia de más atacantes o explosivos.
Contexto de violencia regional
El movimiento Hamas celebró el ataque, aunque no lo reivindicó. Lo calificó como una reacción a las acciones israelíes en los territorios ocupados.
Este fue el ataque más letal desde octubre de 2024, cuando un tiroteo en Tel Aviv causó siete muertos.
Según datos de la ONU, desde el inicio de la guerra hasta julio de 2025, al menos 49 israelíes murieron por ataques palestinos y 968 palestinos fueron abatidos en Israel y Cisjordania.
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