Nuevas redes de corrupción en los negocios sucios del exgobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca y su familia.

05-abril-2024

Con las revelaciones de Horacio García Rojas a Código Magenta, se han puesto al descubierto nuevas redes de corrupción en los negocios sucios del exgobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca y su familia.
En su entrevista no autorizada con la publicación digital, García Rojas exhibe cómo amasó una gran fortuna con negocios ilegales mediante el tráfico de influencias.
García Rojas es un dentista de Reynosa que pasó a ser un próspero empresario en cinco años, gracias a su alianza y apoyo del exgobernador y a su íntima amistad con Sergio Carmona, conocido como ‘El Rey del Huachicol’ asesinado en 2021, vinculado igualmente con CDV.
Tras las revelaciones hechas a Código Magenta, han vuelto a cobrar fuerza los negocios turbios por él operados desde la subsecretaría de Salud en Tamaulipas, donde fue responsable del ejercicio presupuestal, uno de los cuales fueron los famosos seguros de gastos médicos contratados para trabajadores de la secretaría y del DIF estatal, supuestamente para asegurarlos durante la pandemia de COVID, los cuales resultaron un fraude pues no se hicieron efectivos porque los contrataron con una empresa fantasma vinculada con CDV. El fraude fue por más de 500 millones de pesos y, además del gobernador y García Rojas, estuvo involucrado el senador Ismael Cabeza de Vaca.
Al respecto, durante la comparecencia del secretario de Salud en el Congreso del Estado, realizada el 14 de abril de 2023, el diputado Gustavo Cárdenas Gutiérrez, del MC, preguntó al compareciente sobre el fraude del seguro de vida “patito” manifestando que los recursos de la secretaría de Salud, “Fueron víctimas de rapaces individuos que antepusieron sus bolsillos a la salud de todas y todos”.
Otro de los negocios fuera de la ley operados por García Rojas desde el gobierno panista, fue la compra de medicamentos falsos contra el cáncer donde Horacio y los Cabeza gastaron 60 millones de pesos a través de una empresa fantasma, según denuncia hecha pública por la Auditoría Superior de la Federación (ASF). Además del daño patrimonial, este desfalco costó la vida a numerosos pacientes con cáncer.
Las denuncias por compras simulados fueron una constante del sexenio cabecista, al igual que las famosas “factureras” que tomaron al sector Salud como su paraíso, donde igualmente defraudaron con uniformes de médicos y enfermeros, materiales y equipo y no se diga con instalaciones e insumos durante los dos años que duró la pandemia del coronavirus.
Incluso, fue secreto a voces la desaparición de 15 millones de pesos de una “casa de seguridad” localizada en ciudad Victoria, en la que Ismael García escondía los “retornos” que los proveedores entregaban en efectivo a la directora de recursos materiales de la SSA, de nombre “Laura” que fueron robados por un chofer de la dependencia y que se utilizaban para financiar campañas electorales.
Tras renunciar a su cargo gubernamental y sobrevivir a un atentado, hoy trasciende que García Rojas dejó su puesto para continuar involucrado en los negocios de los García Cabeza de Vaca.
A pesar de que la mala fama de Cabeza de Vaca y del desprestigio que representa para los intereses del PAN, el ex gobernador sigue litigando en los más altos niveles de la justicia mexicana para mantenerse en la lista de diputados plurinominales federales, recobrar el fuero con el que ha traficado influencias y seguir adelante con su carrera de defraudación.