Melbourne, Australia – En un giro inesperado, el equipo Red Bull de Fórmula 1 ha revelado la causa detrás de la falta de rendimiento del piloto mexicano Sergio “Checo” Pérez durante el Gran Premio de Australia, celebrado en el circuito de Albert Park en Melbourne.
La carrera, que tuvo lugar como la tercera ronda de la temporada 2024 de Fórmula 1, fue testigo de un desempeño desafiante para Pérez, quien partió desde la sexta posición después de recibir una penalización de tres lugares por obstruir a Nico Hulkenberg durante la clasificación.
A pesar de un inicio prometedor, Pérez se vio relegado al séptimo lugar al inicio de la carrera, superado por el Mercedes de George Russell. Su lucha por recuperar terreno se vio obstaculizada por la incapacidad de sacar el máximo provecho de sus neumáticos medios en las primeras vueltas.
El equipo Red Bull tomó la decisión estratégica de extender la primera parada en boxes de Pérez, optando por neumáticos duros. Esta elección pareció dar sus frutos cuando Pérez mostró un ritmo mejorado, adelantando a varios competidores y alcanzando el quinto lugar.
Sin embargo, la esperanza de un ascenso continuo se desvaneció cuando Pérez comenzó a perder rendimiento y a ceder terreno con sus rivales. La situación se agravó aún más cuando Pérez no logró mantener su ritmo después de adelantar a Fernando Alonso y terminó cruzando la línea de meta en el quinto lugar, muy por detrás de los líderes de la carrera.
Inicialmente, se creyó que la falta de rendimiento de Pérez se debía a problemas de puesta a punto del vehículo. Helmut Marko, asesor del equipo Red Bull, sugirió esta posibilidad al finalizar la carrera. Sin embargo, el director del equipo, Christian Horner, arrojó luz sobre el verdadero motivo detrás del bajo rendimiento de Pérez.
Horner explicó que una visera descartable quedó atrapada debajo del coche de Pérez, provocando una pérdida significativa de carga aerodinámica. Esta anomalía ocurrió justo después de que Pérez adelantara a Fernando Alonso, alterando drásticamente el comportamiento del vehículo y afectando su rendimiento en pista.
“Literalmente, al pasar a Fernando, el coche no funcionó como debería”, declaró Horner. “Y entonces empiezas a ver degradación en el neumático y de nuevo al final del segundo stint, lo que ha sido inusual para nuestros coches”.
La pérdida de carga aerodinámica, estimada en más de 20 puntos, demostró la sensibilidad de los coches de Fórmula 1 a incluso los elementos más pequeños que pueden afectar su rendimiento.
El descubrimiento de Red Bull sobre la causa detrás de la falta de ritmo de Pérez destaca la complejidad y la delicadeza de la ingeniería detrás de estos bólidos de carreras, y subraya la importancia de la atención al detalle en un deporte donde cada milésima de segundo cuenta.