50 Cent intensifica sus críticas hacia Sean “Diddy” Combs en medio de las graves acusaciones de tráfico sexual y agresión, defendiendo su postura de advertencias previas sobre el magnate.
El rapero Curtis Jackson, mejor conocido como 50 Cent, ha intensificado sus críticas hacia su antiguo rival Sean “Diddy” Combs en medio de las graves acusaciones de tráfico sexual y agresión que enfrenta el magnate de la música. Jackson, de 49 años, aprovechó los recientes escándalos legales de Combs para defender su postura crítica de años, argumentando que ha estado advirtiendo sobre la conducta de Combs durante más de una década.
En una reciente entrevista exclusiva con la revista People, 50 Cent reiteró su opinión sobre Diddy, quien fue arrestado en septiembre en un hotel de Manhattan y se ha declarado inocente de los cargos en su contra, entre ellos extorsión y transporte para participar en prostitución. “Lo he estado diciendo durante 10 años”, declaró Jackson, quien reconoció que sus comentarios y burlas hacia Combs, tanto en sus conciertos como en redes sociales, pueden parecer “escandalosos”. Sin embargo, el rapero afirmó que siempre se ha mantenido al margen de ese estilo de vida.
La rivalidad entre ambos se remonta a 2006, cuando 50 Cent lanzó el diss track “The Bomb”, en el que acusó a Combs de estar involucrado en el asesinato del rapero The Notorious B.I.G. en 1997. Combs ha negado categóricamente dichas acusaciones, pero la disputa entre ambos creció con el tiempo, alimentada también por sus marcas rivales de vodka y sus diferencias públicas.
Nuevos problemas legales y un documental en camino
La situación legal de Sean Combs ha tomado un giro inesperado con la producción de un documental titulado Diddy Do It?, realizado por 50 Cent a través de su productora G-Unit Film & Television. La serie, que examinará las múltiples acusaciones contra Combs, se ha presentado como una narrativa compleja que abarca décadas de controversias. En un comunicado conjunto, Jackson y la directora Alexandria Stapleton señalaron que “las acciones individuales no deben opacar las contribuciones más amplias de la cultura hip hop”, al tiempo que instaron al público a mantener una perspectiva amplia sobre la escena musical.
Este proyecto no solo busca explorar la controversia alrededor de Diddy, sino también destinar sus ingresos al apoyo de sobrevivientes de agresión sexual. La realización del documental coincide con el creciente número de denuncias presentadas contra el productor musical, lo que ha aumentado la presión mediática y pública sobre su figura.
Un historial de escándalos que se intensifica
La caída en desgracia de Sean Combs comenzó en noviembre de 2023, cuando su expareja, Casandra “Cassie” Ventura, lo demandó por violación y abuso durante su relación de 10 años. Aunque Diddy negó las acusaciones y resolvieron el caso al día siguiente, la situación empeoró en mayo de 2024 con la publicación de un video en el que el rapero aparece agrediendo brutalmente a Cassie en un hotel en 2016. Este material desató una ola de críticas y forzó a Combs a emitir una disculpa pública. Desde entonces, otras personas han salido a la luz denunciando haber sido agredidas por el rapero en circunstancias similares.
De acuerdo con los abogados de las víctimas, en el próximo mes se presentarán más de 120 demandas formales contra Diddy, que abarcan un período de 20 años de presuntos abusos. Las denuncias incluyen agresión sexual, distribución de sustancias con fines delictivos, grabaciones ilegales de video y abuso sexual de menores, perpetrados en lugares privados como residencias y fiestas organizadas por el propio Combs.
Los representantes legales han afirmado que han recibido más de 3,000 denuncias en un plazo de solo 10 días, de las cuales más de 120 han sido corroboradas como creíbles. Las acusaciones contra Combs incluyen además la distribución de drogas a las víctimas y el encarcelamiento falso, generando una tormenta legal sin precedentes para el rapero y empresario.
Mientras el caso avanza en los tribunales, la industria musical y los medios continúan observando el desarrollo de lo que podría ser uno de los juicios más mediáticos de la última década.