La mañana de hoy, la Ciudad de México se estremece con la noticia de que las autoridades están tras los pasos de Patricio Cabezut, ex conductor del reconocido programa matutino “Hoy”, quien enfrenta acusaciones graves de abuso sexual hacia sus propias hijas. Este escalofriante giro en el caso ha sacudido a la opinión pública, dejando en entredicho la confianza en la justicia y poniendo en el centro de la discusión el tema de la violencia intrafamiliar.
El caso de Patricio Cabezut ha estado en los titulares desde principios del año 2022, cuando su entonces esposa, Aurea Zapata, lo denunció por presunta agresión familiar. En aquel momento, el proceso legal determinó que Cabezut permanecería en libertad, ya que las pruebas presentadas no fueron suficientes para su encarcelamiento.
Desde entonces, la disputa entre Cabezut y Zapata ha sido pública, con ambos intercambiando acusaciones y exigencias. Mientras el conductor clamaba por el derecho de ver a sus hijas, Zapata insistía en que se sometiera a exámenes psicológicos para garantizar la seguridad y bienestar de las menores.
Sin embargo, el caso ha dado un giro aún más oscuro dos años después, con la noticia de que una orden de aprehensión ha sido emitida contra Cabezut por presunto abuso sexual hacia sus hijas. Esta grave acusación ha provocado un escándalo aún mayor, con la sociedad exigiendo justicia y respuestas.
El reportero Carlos Jiménez ha sido clave en la difusión de esta información, revelando detalles sobre la orden de aprehensión y el estado actual del caso. Mientras tanto, Aurea Zapata ha utilizado las redes sociales para denunciar el desempeño de un juez, al que acusa de poner en riesgo su seguridad y la de sus hijas.
En un video publicado en su cuenta de Instagram, Zapata expresó su temor por la vida de sus hijas y la suya propia, señalando la urgencia de una respuesta por parte de las autoridades. Hasta el momento, Patricio Cabezut no ha emitido ningún comentario sobre estas acusaciones.
La búsqueda de Cabezut por parte de la Fiscalía ha desatado un frenesí mediático, con la sociedad exigiendo justicia y respuestas claras. Este caso ha puesto en relieve la importancia de abordar la violencia intrafamiliar de manera eficaz y proteger a las víctimas más vulnerables, especialmente a los niños.