El jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, expresó este viernes su preocupación por la seguridad de la líder opositora venezolana María Corina Machado y del candidato presidencial Edmundo González Urrutia, tras las amenazas y acciones represivas del régimen de Nicolás Maduro. En una conversación telefónica, Blinken felicitó a Urrutia por haber recibido la mayoría de los votos en las elecciones del pasado 28 de julio y manifestó su inquietud por la seguridad y el bienestar tanto de él como de Machado, según un comunicado del Departamento de Estado.
La preocupación de Blinken se suma a la denuncia de Vente Venezuela, el partido de Machado, sobre un ataque a su sede durante la madrugada del viernes, en el que seis hombres armados sometieron a los vigilantes y se llevaron equipos y documentos. Estos hechos ocurrieron en un contexto de creciente represión por parte del régimen de Maduro, que acusa a los líderes opositores de ser responsables de actos violentos y ha amenazado con encarcelarlos.
El diplomático estadounidense reconoció este jueves a González Urrutia como el legítimo ganador de las elecciones, basándose en las “pruebas abrumadoras” presentadas por la oposición. Washington, junto con otros países como Argentina, Uruguay, Ecuador, Costa Rica, Perú y Panamá, ha reconocido la victoria de Urrutia. Sin embargo, países como Colombia, México y Brasil, así como la Unión Europea, han exigido transparencia en el proceso electoral.
Las protestas que estallaron tras la proclamación de Nicolás Maduro han resultado en al menos 16 civiles muertos y más de 1.200 detenciones, según organizaciones defensoras de derechos humanos. Maduro, en un discurso televisado, acusó a los líderes opositores de tener las manos manchadas de sangre y afirmó que deben estar tras las rejas.
Entretanto, Edmundo González Urrutia ha abogado por evitar una “eventual usurpación de funciones” del Consejo Nacional Electoral (CNE) por parte de “otro órgano del Estado”, en referencia a la intervención del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ). González Urrutia explicó que no asistió al TSJ en defensa de la voluntad popular expresada en las elecciones del 28 de julio, para evitar que esa voluntad sea desconocida.
El Supremo, presidido por la chavista Caryslia Rodríguez, ha instado a todos los involucrados a acatar la sentencia sobre la revisión del resultado electoral, la cual aún no tiene una fecha definida. Durante la jornada, la inasistencia de González Urrutia al TSJ fue criticada por Maduro, quien calificó al candidato opositor de “cobarde”.
En una columna publicada en el diario The Wall Street Journal, María Corina Machado expresó su temor por su vida y señaló que podría ser capturada en cualquier momento. La líder opositora se ha declarado en clandestinidad ante las amenazas de encarcelamiento.
González Urrutia, por su parte, ha instado al CNE a garantizar la transparencia y confiabilidad de los procesos electorales y ha solicitado la publicación de las actas de escrutinio, la totalización y las auditorías. En su declaración, afirmó que buscará soluciones y espacios de diálogo para asegurar que se respete la voluntad del pueblo venezolano.